Tokio afirma que Seúl los ocupa ilegalmente
El Gobierno de Corea del Sur convocó el martes a un consejero de la Embajada de Japón en Seúl para presentar una queja contra las nuevas reclamaciones territoriales por parte de Tokio de unos islotes bajo control administrativo surcoreano.
Seúl citó al consejero Kenji Kanasugi para expresar su protesta al considerar que el Ejecutivo de Shinzo Abe «distorsiona, reduce y omite los hechos históricos», según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, en relación a la propiedad de los islotes conocidos como Dokdo en Corea del Sur y Takeshima en Japón.
Concretamente, Tokio argumentó en su Libro Azul Diplomático de 2015 que estos islotes situados entre ambos países el Mar de Japón (Mar del Este) son territorio nipón según la historia y el derecho internacional aunque permanecen ocupados ilegalmente por Corea del Sur.
Además, el lunes el Gobierno japonés aprobó los nuevos libros de texto para estudiantes de secundaria del país, en los que se expone la misma afirmación.
La disputa de las Rocas de Liancourt (nombre geográfico de los islotes) es un tema de extrema sensibilidad en Corea del Sur, un país con un nacionalismo muy arraigado donde se multiplican las protestas de las autoridades y los ciudadanos cada vez que Japón cuestiona su soberanía.
Seúl mantiene el control de facto de estos dos islotes y 35 rocas que en total suman 0,2 kilómetros cuadrados.
Los únicos habitantes de Dokdo/Takeshima son dos ancianos surcoreanos, aunque este territorio también cuenta con la presencia constante de militares del país para garantizar su dominio de facto.
Las reclamaciones de Japón sobre los islotes, que se han hecho más constantes desde la llegada al poder de Abe en 2012, suelen dañar las relaciones diplomáticas bilaterales entre ambos países.
Seúl y Tokio mantienen fuertes lazos económicos y comerciales a pesar de sus disputas históricas y territoriales, heredadas de la época de la colonización japonesa de la península de Corea en la primera mitad del siglo XX. (EFE)