Tokio y Pekín celebran su primera reunión en cuatro años
China y Japón celebraron el jueves en Tokio su primera reunión en materia de seguridad en cuatro años y se comprometieron a continuar con este tipo de diálogo bilateral, suspendido por el recrudecimiento de su disputa territorial.
En el encuentro celebrado entre altos funcionarios de los ministerios de Asuntos Exteriores y Defensa de ambos países las dos partes coincidieron en que sería deseable mantener estas reuniones «una vez al año» como parte de los esfuerzos para aliviar las tensiones en torno a las islas Senkaku, bajo disputa común.
«Tanto Japón como China expresaron la opinión de que es importante que aumenten los esfuerzos para lograr la pronta aplicación de un mecanismo de comunicación marítima y aérea,» explicó en declaraciones recogidas por la agencia Kyodo un funcionario nipón después de la reunión.
Además, Japón instó a China a aumentar la transparencia en su política de defensa incluyendo el crecimiento anual de su presupuesto de defensa durante el último cuarto de siglo.
Pekín anunció recientemente que aumentará este año su gasto de defensa un 10,1 %, hasta situarlo en 886.900 millones de yuanes (144.200 millones de dólares, 127.000 millones de euros).
El anterior diálogo de seguridad bilateral, entre China y Japón se celebró por última vez en enero de 2011.
En 2012, la compra, de manos de su dueño privado, por parte de Japón de tres de los islotes Senkaku, cuya soberanía reclama China, enfureció a Pekín y llevó a las relaciones diplomáticas entre ambos a su peor momento en décadas.
Desde entonces, Tokio efectúa constantes protestas ante las que considera intrusiones por parte de barcos chinos en sus aguas territoriales en torno a las Senkaku.
Finalmente, el pasado noviembre, el canciller japonés, Fumio Kishida, y su homólogo chino, Wang Yi, se mostraron de acuerdo en reiniciar el diálogo de seguridad en Tokio.
Situado en el Mar de China Oriental, a unos 175 kilómetros al noreste de Taiwán (que también reclama los islotes) y 150 al noroeste de las islas niponas de Okinawa, el deshabitado archipiélago de Senkaku tiene una superficie de siete kilómetros cuadrados y se cree que alberga recursos marinos y energéticos. (EFE)