La mayoría falleció por golpes de piedras
Los equipos de rescate reanudaron hoy la búsqueda de víctimas en el volcán nipón Ontake tras tres días sin poder acceder a su cima a causa un tifón, y hallaron dos cuerpos más que elevan a 53 el número provisional de muertos por la erupción.
Las operaciones de búsqueda permanecían suspendidas desde el pasado domingo a causa del poderoso tifón Phanfone, cuyo paso por el centro de Japón provocó abundantes lluvias y ráfagas de viento que generaron riesgo de desplazamientos de tierra y desprendimientos en el Ontake.
Las condiciones meteorológicas han dificultado aún más las tareas del millar de operarios de los bomberos, la policía y las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) que participan en la búsqueda, que ya debían trabajar entre la gran cantidad de ceniza y rocas expulsadas por la erupción del pasado 27 de septiembre.
Los operarios encontraron hoy dos nuevos cadáveres cerca de la cima del volcán, que elevan el balance provisional de fallecidos a 53, según informó la agencia Kyodo.
La búsqueda se ha centrado hasta ahora en la cima y sus proximidades, donde aparecieron gran parte de las víctimas mortales halladas por el momento, la mayoría de los cuales fallecieron por golpes de piedras escupidas durante la erupción.
Los servicios de rescate ampliarán su búsqueda a los senderos que ascienden hasta la cumbre y también fuera de estos caminos, según explicó un responsable de estas operaciones a la cadena estatal NHK.
Además, los operarios han instalado barreras provisionales en las zonas donde se está buscando para protegerse de los posibles desprendimientos que pueden originarse en la montaña debido a la acumulación de cenizas, rocas, agua y hielo.
Las autoridades niponas también han instalado barreras de contención para evitar que las abundantes lluvias arrastren cenizas volcánicas y rocas hasta Kiso y Otaki, las localidades ubicadas al pie del volcán. (EFE)