Japón es la segunda comunidad flamenca del mundo
Once guitarristas japoneses cuya trayectoria ha estado marcada por Paco de Lucía o que incluso le conocieron personalmente rindieron en Tokio un homenaje al genio del flamenco.
Entre ellos estuvo una prometedora guitarrista de 15 años, Naho Akutsu, que decidió estudiar toque flamenco inspirada por la música del artista gaditano; el internacionalmente reconocido Eizo Tawara, el primer japonés en actuar en la Bienal de Flamenco de Sevilla y en el festival Suma Flamenca de Madrid; y el consejero de la Asociación Flamenca de Japón Hideo Suzuki, quien conoció personalmente a Paco de Lucía.
Suzuki presenció el primer concierto de Paco de Lucía en Japón en 1972, en la ciudad de Osaka, y quedó tan marcado por su actuación que decidió viajar a España para perfeccionar su técnica y profundizar en la cultura flamenca.
«Nunca había visto algo así», recuerda Suzuki, que se acercó al músico y compositor tras su actuación, quedó sorprendido por su «sencillez» y le invitó a visitar el tablao flamenco que regentaba en Kobe (sur de Tokio).
Suzuki también pidió a Paco de Lucía que actuara en una velada flamenca organizada en su local, aunque para atraer a más público anunció como cabeza de cartel a una popular bailaora japonesa de la época, ya que el músico andaluz aún no era aún conocido en Japón.
«La gente se dio cuenta rápidamente de que estaba ante un guitarrista único», relata Suzuki, quien ha mantenido el contacto con el artista durante las últimas tres décadas.
Su desaparición «es una gran pérdida para el mundo de la música y del flamenco», añade el guitarrista japonés.
«Para mí sería imposible tocar una pieza de Paco de Lucía, él estaba a otro nivel», admite entre risas Suzuki.
La comunidad del flamenco en Japón -segundo país del mundo por detrás de España, en número de personas que aprenden y practican esta disciplina- lamentó la muerte del guitarrista y compositor español Paco de Lucía, al que consideran como el músico de esta disciplina más influyente en el país asiático.
Paco de Lucía murió el pasado febrero a los 66 años de edad, y su aportación al flamenco ha sido reconocida de forma unánime por críticos y aficionados de todo el mundo. (EFE)