El 30 % de la población se quedaría sin agua potable
Un terremoto de gran magnitud en la zona metropolitana de Tokio, a las 8 de la mañana, dejaría varados a 1,8 millones de pasajeros de tren y forzaría a 45 vuelos a desviarse de sus rutas pues no podrían aterrizar en el aeropuerto de Haneda, según el Ministerio de Transporte de Japón, informó Asahi Shimbun.
El suministro de agua se vería interrumpido durante una semana, privando de agua potable al 30 % de la población de Tokio y las prefecturas vecinas de Chiba, Kanagawa y Saitama.
El seísmo dañaría o destruiría estaciones de tren y obligaría a cerrar las pistas de aterrizaje de Haneda, y muchas personas quedarían atrapadas en ascensores en Tokio, Kanagawa, Saitama y Chiba, donde se estima que existen alrededor de 260.000.
El gobierno japonés tiene previsto ejecutar medidas antisísmicas para fines del año fiscal 2017 en estaciones de tren con más de 10.000 pasajeros diarios.
Asimismo, prevé reforzar la seguridad de los usuarios de Haneda mejorando el control del tráfico aéreo si el aeropuerto no puede ser utilizado.
Por otro lado, tiene previsto instalar equipos de detección temprana de ondas sísmicas en el área metropolitana de la capital japonesa y mejorar las tareas de rescate en colaboración con los fabricantes de ascensores y el departamento de bomberos. (ipcdigital)
Descubre más desde International Press - Noticias de Japón en español
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.