Gobierno busca atenuar efecto de la próxima subida del impuesto sobre el consumo
El parlamento de Japón aprobó el jueves un presupuesto récord para el próximo ejercicio de 95,88 billones de yenes (678.760 millones de euros) destinado a evitar un frenazo económico derivado de la próxima subida del impuesto sobre el consumo.
Las partidas fueron aprobadas en la Cámara Alta con los votos de la mayoría formada por el gobernante Partido Liberal Demócrata (PLD) y su socio de coalición, Nuevo Komeito.
El presupuesto contiene medidas para acolchar el efecto de la subida impositiva que entra en vigor el próximo 1 de abril, fecha en la que comienza el nuevo año fiscal en Japón, y que muchos temen que pueda minar el consumo, que supone un 60 por ciento de la economía local.
Entre esas medidas está el potenciar las obras públicas mediante una partida de unos 6 billones de yenes (42.466 millones de euros).
De cara a reforzar la vigilancia de las zonas en disputa territorial con China el gasto en defensa también se incrementará por segundo año consecutivo hasta alcanzar casi 5 billones de yenes (35.399 millones de euros).
Al mismo tiempo, el coste cada vez mayor de programas de la seguridad social de Japón, uno de los países más avejentados del mundo, superará por primera vez los 30 billones de yenes (212.551 millones de euros).
De este modo, el gasto público alcanzará un volumen récord de 72,61 billones de yenes (514.593 millones de euros), un 3,08 por ciento más que en el ejercicio actual.
La medida está en línea con el programa de reforma económica abanderado por el Gobierno del primer ministro Shinzo Abe, que considera el incremento del gasto público uno de los tres pilares para acabar con el aletargamiento económico del país.
No obstante, los partidos de la oposición han criticado que la actual administración incurra en lo que consideran un desperdicio de fondos que puede deteriorar aún más la deuda pública de Japón, que es de más del doble de su PIB y es la mayor del mundo desarrollado.
El Gobierno, por su parte, se ha comprometido a potenciar la rehabilitación fiscal y asegura que reducirá la emisión de bonos este año en un 3,87 por ciento con respecto a lo programado originalmente para el ejercicio aún en curso hasta un total de 41,25 billones de yenes (292.529 millones de euros). (EFE)
