Compañía japonesa y su subsidiaria aceptan acuerdo de culpabilidad
La corporación nipona de electrónica Panasonic, y su subsidiaria Sanyo, acordaron pagar 56,5 millones de dólares tras admitir las acusaciones a las que se enfrentaba en EEUU por fijar precios en productos para automóviles y baterías.
En un comunicado, la empresa con sede en Osaka acordó aceptar «el acuerdo de culpabilidad con el Departamento de Justicia de EEUU, aceptando el pago de las multas para resolver la demanda por violar las leyes antimonopolio» de este país.
El órgano estadounidense solicitaba a Panasonic una compensación de 45,8 millones de dólares al considerar que fijó precios en EEUU en productos para el automóvil con diversos clientes, entre ellos los fabricantes nipones Toyota o Nissan.
En concreto, se le acusaba de haber fijado precios con Toyota entre 2003 y 2010, y con Honda, Nissan y Mazda, entre 1998 y 2010.
Mientras, a Sanyo el Departamento de Justicia le impuso una multa de 10,7 millones de dólares por violar las leyes antimonopolio de EEUU en las ventas de sus baterías de ion-litio para ordenadores portátiles entre 2007 y 2008.
«Ambas compañías han colaborado con las investigaciones abiertas por el Departamento de Justicia de EEUU y han decidido aceptar el acuerdo de culpabilidad», detalló Panasonic en el comunicado.
Además, la compañía anunció que tras asumir «este serio problema» diversos directivos de la firma, entre ellos su presidente y consejero delegado, «devolverán entre el 20 y el 10 por ciento de sus bonificaciones» correspondientes al año fiscal 2012. (EFE)