“Quiero vivir tranquilamente”, dijo la mujer al llegar a Nagoya.
Giullyane Futenma (21), la nikkei brasileña que ganó el juicio a la Oficina de Inmigración por el uso de la ayuda de 300.000 yenes para regresar a su país, ingresó a Japón el día viernes por el aeropuerto de Kansai.
A las 22hrs de ese mismo día, la brasileña llegó a Nagoya donde fue recibida por su esposo (22) de la misma nacionalidad poniendo fin a un año de separación.
“Pasó mucho tiempo, pero fue bueno esperar. Agradezco a toda la gente que apoyó mi regreso. Ahora quiero vivir normalmente en Japón”, dijo la brasileña según el site japonés @Shizuoka.
Giullyane vivió en Japón desde los 7 años, pero en 2009 debido a aguda crisis de empleo sus padres la llevaron, siendo aún menor de edad, de vuelta a Brasil usando una ayuda económica gubernamental.
En diciembre de 2011, su esposo, un nikkei brasileño de 22 años, tramitó el certificado de elegibilidad para ella, pero las autoridades migratorias de de Hamamatsu le negaron el ingreso a Japón debido al uso de los 300.000 yenes.
Con el apoyo de abogados japoneses, la pareja abrió un proceso judicial contra la Oficina de Inmigración de Hamamatsu que en mayo de este año llegó a su fin cuando el Tribunal de Justicia de Shizuoka autorizó su reingreso a Japón.
