Extécnico de la CIA buscaría protección china
El Gobierno de EE.UU. teme que Edward Snowden, el joven que reveló la existencia de programas de vigilancia secretos, filtre información clasificada del país a China, informaron hoy altos funcionarios cercanos al caso a la cadena de televisión ABC.
Los agentes de inteligencia que están sobre la pista del joven, cuyo último paradero conocido fue Hong Kong, están tratando el caso como un posible asunto de espionaje extranjero, al aumentar los temores de que pretenda obtener asilo de China a cambio de información secreta estadounidense.
«Creo que hay una preocupación real acerca de eso», explicó a la cadena un funcionario relacionado con el caso, mientras que otro consideró que esa preocupación del Gobierno es «muy legítima».
El Gobierno chino guarda silencio sobre Snowden, un genio de la informática que trabajó como analista de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de EE.UU., mientras los medios oficiales chinos temen consecuencias para las relaciones bilaterales.
Las revelaciones de Snowden, quien asegura también que EE.UU. espía desde hace años a China, añaden nueva presión a la compleja relación entre ambos países.
En una entrevista divulgada este miércoles por el diario de Hong Kong «South China Morning Post», Snowden afirmó que el Gobierno de EE.UU. ha perpetrado ataques cibernéticos contra China y la excolonia británica de Hong Kong durante años.
Snowden se encuentra en paradero desconocido en el enclave autónomo, donde quiere permanecer y luchar contra cualquier solicitud de extradición por parte de EE.UU., según ha declarado.
Hong Kong cuenta con un tratado de extradición con Estados Unidos, pero, aunque Washington ha abierto una investigación sobre el caso, hasta el momento no ha presentado cargos contra el exanalista.
Snowden filtró la pasada semana a los diarios The Guardian y The Washington Post la existencia de dos programas secretos mediante los que EE.UU. recopila registros telefónicos y datos digitales de millones de usuarios.
El joven ha estado una década relacionado con la inteligencia estadounidense, primero como técnico informático de la CIA, basado en Ginebra, y después como consultor en varias empresas externas de defensa que colaboran con la NSA, según reveló él mismo al diario británico The Guardian.
Según la Administración Obama, ambos programas funcionan bajo el amparo de la Constitución y las leyes estadounidenses. (EFE)