Escritor peruano gana el I Premio Internacional Carlos Fuentes
Alberto Cabezas / EFE
El peruano Mario Vargas Llosa instó hoy a los Gobiernos, instituciones culturales, escritores y a los propios hispanohablantes a defender el español por considerarlo el idioma «más pujante» del mundo, solo superado en dinamismo por el inglés.
«Creo que queda todavía mucho por hacer y que en esto deben colaborar tanto los Gobiernos y las instituciones culturales, como las personas individuales», dijo el escritor, ganador hoy del I Premio Internacional Carlos Fuentes a la Creación Literaria en el Idioma Español otorgado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes mexicano (Conaculta).
Vía telefónica y tras agradecer al jurado la concesión del galardón, Vargas Llosa, premio Nobel de Literatura 2010, consideró que el español vive un excelente momento, aunque no es motivo para «sentirnos complacidos ni sentarnos sobre nuestros laureles».
«Es un gran patrimonio el que tenemos, el de esta lengua común, una lengua moderna, que representa nuestra época, probablemente después del inglés la más pujante, la que tiene un desarrollo mayor. Creo que ese es un patrimonio que debemos defender y promover porque nos enriquece a todos», abundó.
Entre el acervo que atesora el idioma, Vargas Llosa (Arequipa, 1936) destacó el de «una literatura creativa, novedosa, que es traducida y conocida en otros mundos lingüísticos» que él mismo ha contribuido a enriquecer con una narrativa sobresaliente con obras como «La casa verde» (1965), «Conversación en La Catedral» (1969) y «La fiesta del chivo» (2000).
Explicó que en los últimos años se avanzó bastante en «cohesionar cada vez más el mundo de la lengua española», sobre todo desde las Academias de la Lengua, pero llamó a hacer más en cuanto a la «circulación de libros y autores».
Ello permitirá mostrar «la riqueza, la variedad, la diversidad de nuestra literatura», y de apuntalar y fortalecer «el denominador común» que es el idioma, añadió.
Sobre su relación con Fuentes (Ciudad de Panamá, 1928-Ciudad de México, 2012), dijo que el autor mexicano, de quien fue un gran amigo, fue «uno de los grandes escritores de nuestra lengua».
«Conocí a Carlos (…) en los años sesenta, con motivo de un viaje que hice a México enviado por la Radio Televisión Francesa, donde yo trabajaba, para cubrir una información sobre una exposición francesa que había en México. Allí conocí a Carlos y desde entonces fuimos muy amigos», sostuvo.
Los dos compartieron «esa experiencia maravillosa que fue la del llamado ‘boom’, o sea el descubrimiento de nuestra narrativa, de nuestra literatura por los propios latinoamericanos y en el resto del mundo», dijo.
«En ese movimiento Carlos tuvo un papel principalísimo, no solo por las obras que escribió, sino por la manera en cómo promovió a otros escritores latinoamericanos, cómo estimuló a los jóvenes escritores ayudándolos a conseguir editores y promoviendo, sobre todo, la difusión de sus libros», elogió Vargas Llosa.
Alabó, además, su papel como «un gran agitador cultural», «un hombre muy carismático» que supo aprovechar ese don «muchísimo para difundir la literatura latinoamericana» y «unir a escritores de distintos países, de distintas lenguas y continentes».
«Creo que si hay un escritor latinoamericano que fue un escritor universal, un ciudadano del mundo en todos los sentidos de la palabra, fue Carlos Fuentes», añadió.