Con una determinación que desafía el resultado oficial de los.jueces, el boxeador mexicano Alan Picasso envió un mensaje contundente al mundo tras su enfrentamiento contra el monarca absoluto, el japonés Inoue Naoya: «No me siento derrotado». A pesar de que las tarjetas no le favorecieron, el joven retador de 25 años abandonó el cuadrilátero del Muhammad Abdo Arena convencido de que su desempeño en la recta final del combate puso en aprietos al sistema de dominio que nipón ha mantenido durante años.
Inoue logró imponerse por decisión unánime este 27 de diciembre, alcanzando un récord histórico de 27 victorias consecutivas en peleas de título mundial. Sin embargo, la narrativa de la noche fue compartida con la resistencia de Picasso, quien se convirtió en uno de los pocos rivales capaces de soportar los doce asaltos frente al «Monstruo» sin caer a la lona. El púgil mexicano fue trasladado al hospital tras la pelea por precaución, pero desde allí, en declaraciones para la revista The Ring, explicó su visión de la pelea: “No me siento derrotado, pero mi sueño de ser campeón mundial sigue vivo. Me prepararé y volveré más fuerte”.
Pero la contienda fue favorable al japonés, quien mostró su arsenal habitual de combinaciones rápidas y golpes de gran tonelaje, tomando la iniciativa y llevando a Picasso contra las cuerdas en múltiples ocasiones. No obstante, la defensa del mexicano se mantuvo firme, cerrando espacios y buscando contragolpear con ganchos de izquierda para romper el ritmo del campeón.
Aunque Inoue mantuvo su movilidad ligera y evitó daños significativos, la falta de un golpe de gracia permitió que Picasso ganara confianza conforme avanzaban los minutos, terminando la pelea con una agresividad que sorprendió a los analistas. «Sentí que fui superior en algunas partes de los últimos asaltos de la pelea, pero sí, fue dura. Aun así, esperaba algo más duro de Inoue: más explosivo, más potente…», declaró Picasso.
Aún así, el guerrero mexicano, que sufrió su primer revés profesional tras 34 combates, se mostró respetuoso en una publicación en su cuenta de Instagram: «No se logró la victoria esta vez, pero me voy con aprendizaje, experiencia y más hambre de seguir creciendo. Esto no termina aquí. Volveré más fuerte. VOY A SER CAMPEÓN DEL MUNDO!. Todo mi respeto y admiración al equipo de Inoue y a todo Japón».
El mundo del boxeo ahora se pregunta si Picasso será capaz de descifrar el enigma de Inoue en un segundo encuentro, tras haber demostrado que puede resistir el poder del boxeador más temido del peso supergallo. (RI/AG/IP/)
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