Hiroshima conmemoró hoy el 80.º aniversario del lanzamiento de la bomba atómica. Como cada año, las autoridades impusieron restricciones de acceso temprano en todo el Parque de la Paz, incluyendo el emblemático Domo de la Bomba Atómica. Esta vez, sin embargo, la jornada amaneció marcada por una fuerte tensión: activistas que habían acampado desde la noche anterior se negaron a desalojar el lugar, lo que derivó en una acción policial sin precedentes.
A las 5:00 a.m., la policía y personal municipal exhortaron por megáfono a los manifestantes, miembros del comité “Acción 8/6 Hiroshima” y portadores de pancartas con mensajes como “Detener la guerra promovida por la reforma constitucional”. Los activistas respondieron formando cadenas humanas y afirmaron que no se moverían.
Ante la negativa, la ciudad consideró que se trataba de una obstrucción al bienestar público y solicitó el apoyo de la policía. A las 6:00 a.m., los agentes antimotines — kodo tai — comenzaron la expulsión forzosa de unos 10 activistas, marcando el primer desalojo de este tipo en la zona del parque.
CHOQUE CON LA POLICÍA
Varios cientos de personas se enfrentaron a los agentes, gritando consignas como “¡Paren la expulsión!” y “¡No toleramos la represión violenta!”. El ambiente se tornó caótico, con empujones y forcejeos entre activistas y policías.
Fuentes de seguridad indicaron que entre los manifestantes se encontraban integrantes del ala radical del grupo Chūkakuha y de su organización estudiantil.
La regulación incluye inspección de pertenencias desde las 5:00 a.m., medida establecida después de un grave incidente en 2023, cuando activistas golpearon a funcionarios municipales dentro del parque. Desde entonces, solo quienes pasan el control de seguridad pueden acceder. (RI/AG/IP/)
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