Los Ángeles vive una tragedia que marca un antes y un después. Desde el 7 de enero, varios incendios forestales de gran magnitud se han desatado en localidades cercanas como Pacific Palisades, Altadena y Sylmar. Estas catástrofes, avivadas por el aire seco y los fuertes vientos Santa Ana, han obligado a más de 100.000 personas a abandonar sus hogares y han dejado un rastro de destrucción y desesperación entre los afectados.
William González, uno de los damnificados en Altadena, mostró a la prensa local los restos de su hogar, del que solo queda la chimenea. “Hemos perdido prácticamente todo”, dijo con voz quebrada. “Nuestros sueños se han reducido a cenizas”.
En esta misma localidad, al menos 500 edificios, entre viviendas y negocios, han quedado completamente destruidos. En una de las calles cubiertas por una espesa capa de ceniza, un hombre de unos 60 años lloraba frente a lo que antes era su pequeña tienda. “Este negocio era toda mi vida”, lamentó.
Victoria Lewis, de 79 años, relató cómo ella y su hijo tuvieron que abandonar apresuradamente su casa en Pacific Palisades tras recibir una alerta en su móvil. “Nunca pensé que tendría que huir del lugar donde he vivido toda mi vida”, declaró.
INFRAESTRUCTURA COLAPSADA
La intensidad de las llamas y la falta de recursos han complicado los esfuerzos de contención. En zonas como Pacific Palisades, los gigantescos depósitos de agua se han vaciado, dejando los sistemas inoperativos. David Stewart, residente de la zona, describió cómo él y sus vecinos han recurrido a palas para sofocar las llamas. “Ya hemos salvado tres casas cercanas, pero el fuego sigue avanzando hacia la nuestra”, advirtió.
Mientras tanto, familias como la de Jessie Banks luchaban con la angustia de estar separadas. Banks buscaba desesperadamente a su hijo, quien evacuó a pie sin llevar consigo un teléfono móvil.
EL CAMBIO CLIMÁTICO LO AGRAVA TODO
California sufre su periodo más seco en años, con ocho meses consecutivos de sequía en la región sur, pese a estar en temporada de lluvias. Según meteorólogos y expertos, el cambio climático ha alterado los patrones de precipitaciones, aumentando la vulnerabilidad de los ecosistemas a los incendios forestales.
Los fuertes vientos Santa Ana, característicos del otoño e invierno en la región, han alcanzado velocidades no vistas desde 2011, lo que ha favorecido la rápida propagación del fuego. Esta combinación de sequedad extrema y vientos huracanados ha resultado devastadora para las comunidades afectadas.
A pesar de que se espera una disminución de los vientos en los próximos días, las alertas por riesgo de incendios se mantendrán al menos hasta este viernes. El panorama sigue siendo sombrío, con miles de personas en albergues temporales, un número creciente de víctimas mortales, y comunidades enteras enfrentando un futuro incierto. (RI/AG/IP/)
This is by far the craziest video from the fire in Los Angeles. This guy is filming huge walls of fire surrounding a house they're in, and there's another person and a dog. I have no idea why they didn't evacuate or what happened to them. Let's hope they're okay. #PalisadesFire pic.twitter.com/QYtsBSKvdl
— Sia Kordestani (@SiaKordestani) January 8, 2025
🚨 LOS ANGELES IS BURNING
🎥 VIDEO: WEST LA NEIGHBORHOOD RIGHT NOW
This is shocking.
Our hearts ache for everyone in Pacific Palisades and Los Angeles as these insane devastating fires rage on.
⛔️ PLEASE, stay safe—nothing is more important than your life and the lives of… pic.twitter.com/dXSllWZZf9
— Shirion Collective (@ShirionOrg) January 8, 2025
BREAKING: LAPD officers are currently rescuing evacuees from the Pacific Palisades wildfire in Los Angeles.
Video footage captures officers assisting a woman, a child, and their dog to safety.pic.twitter.com/QszxPgnuRF
— Resist the Mainstream (@ResisttheMS) January 7, 2025
Descubre más desde International Press - Noticias de Japón en español
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.