El yen cayó hoy a un mínimo de cuatro meses frente al dólar, ya que muchos inversores no esperan en el futuro cercano una intervención del Banco de Japón y el gobierno en el mercado cambiario, a pesar de las reiteradas advertencias verbales de las autoridades japonesas.
A las 14:20 horas, el yen se cotizaba en Tokio a 156.02-03 en compra-venta por dólar, su nivel más bajo desde el 23 de julio y un 3% menos que antes de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. La moneda japonesa ha caído más de un 10% desde su máximo reciente de 139,57 el 16 de septiembre.
La creciente brecha de rendimiento entre Japón y Estados Unidos es el principal impulsor de la actual venta de yenes. El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años subió al 4,464% el miércoles, el nivel más alto desde julio, desafiando las expectativas de que la última cifra de inflación al consumidor estadounidense del 2,6% publicada el miércoles, que estaba en línea con las previsiones, llevaría a más recortes de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Esto refleja las preocupaciones de los inversores de que las políticas económicas del presidente electo Donald Trump puedan expandir aún más la deuda del gobierno estadounidense.
Los inversores especulativos, como los fondos de cobertura y los operadores intradía, también están vendiendo yenes, ya que no creen que el actual entorno diplomático permita al gobierno japonés intervenir en el mercado cambiario para apuntalar la moneda japonesa.
Finalmente, se espera que Trump anuncie esta semana al candidato para el puesto de Secretario del Tesoro, y se prevé que Scott Bessent, uno de los nombres barajados, podría adoptar una postura favorable al fortalecimiento del dólar, lo que presionará aún más a la divisa japonesa. Esta situación deja al yen en una posición de vulnerabilidad, con un repunte de corto alcance en su valor frente al dólar. (RI/NI/IP/)