Un equipo de paramédicos del Cuartel General de Bomberos de la Región Central de Chita, ciudad de Handa en la prefectura de Aichi, no trasladó a un hombre de 70 años a emergencia creyendo erróneamente que había fallecido. La situación ocurrió ayer, 10 de noviembre, en un complejo de apartamentos en el municipio de Higashiura, donde los bomberos recibieron una llamada de emergencia del administrador del edificio, informando que la puerta de una vivienda no se podía abrir.
Al llegar al lugar, los paramédicos encontraron al hombre tirado en el suelo del baño. Tras una evaluación rápida de signos de vida, los paramédicos concluyeron que el individuo estaba en «estado de muerte evidente». No se emplearon instrumentos como electrocardiogramas o estetoscopios, ya que confiaron en sus observaciones visuales y táctiles.
Sin embargo, poco después, un oficial de policía que tomó el relevo notó leves movimientos en los dedos y el rostro del hombre. Ante esta evidencia, se ordenó su traslado inmediato al hospital, pero el paciente falleció horas más tarde.
El jefe de Bomberos de Chita, Fumio Masunai, pidió disculpas públicamente, calificando el suceso de “imperdonable” para una organización de rescate. Añadió que, al ver varios días de periódicos acumulados en la entrada de la vivienda, los rescatistas pudieron haberse dejado llevar por una impresión errónea, lo cual afectó su juicio.
Para prevenir incidentes similares en el futuro, el departamento de bomberos ha emitido nuevas directrices que instan al personal a utilizar equipos médicos como estetoscopios y monitores de signos vitales en todas las evaluaciones, y a evitar cualquier sesgo de percepción que pueda influir en sus decisiones. (RI/AG/IP/)