Por primera vez, las fuerzas de Japón y Estados Unidos están llevando a cabo ejercicios conjuntos que simulan la evacuación de residentes de las islas suroccidentales de Japón en Okinawa, un movimiento destinado a garantizar una coordinación rápida y eficaz entre los dos aliados en caso de un conflicto en torno a Taiwán.
El ejercicio denominado «Keen Sword», el más grande del año fiscal entre EEUU y Japón, involucra a 45.000 efectivos de las Fuerzas de Autodefensa de Japón (SDF) y el ejército estadounidense, con un despliegue conjunto de 40 barcos y 370 aeronaves. El ejercicio, que comenzó ayer miércoles y se prolongará hasta el 1 de noviembre, incluye simulacros de combate terrestre, aéreo y marítimo, defensa de instalaciones clave, y apoyo logístico. Además, fuerzas de Australia y Canadá también participan en algunas partes de las maniobras.
La novedad en esta edición de «Keen Sword», que se lleva a cabo casi cada año desde 1986, es la inclusión de simulacros de evacuación de residentes y el transporte de tropas heridas desde las islas remotas de Japón, las cuales serían afectadas en las primeras fases de un conflicto real en torno a Taiwán. Se emplearán aviones de transporte Osprey de las SDF y el ejército estadounidense para evacuar a residentes de la isla de Yonaguni, situada a solo 110 kilómetros de Taiwán. Esta será la primera vez que esta nave vuela a dicha isla, aunque los residentes no participarán directamente en el ejercicio.
Si bien el simulacro se presenta como preparación ante desastres, un oficial de las SDF señaló que también podría utilizarse en caso de una contingencia en Taiwán.
Yonaguni alberga a alrededor de 1.700 personas, incluyendo personal de las Fuerzas de Autodefensa. Según un plan elaborado por el gobierno japonés en junio, los residentes de la isla —excluyendo al personal militar y gubernamental— serían transportados a Kyushu, la isla principal más cercana, en aviones o barcos civiles dentro de un día en caso de emergencia.
Ante una emergencia en el extranjero, el primer paso será instar a los ciudadanos a evacuar en vuelos comerciales o, de ser necesario, disponer aviones fletados. Si no es posible evacuar a tiempo, se podrían utilizar aeronaves de las SDF. Del mismo modo, en caso de una contingencia en Taiwán, se podrían emplear aviones de las SDF o del ejército estadounidense para evacuar a los residentes de las islas suroccidentales de Japón.
El gobierno japonés anunció en marzo la construcción de refugios en la zona para que los locales puedan evacuar y permanecer hasta dos semanas, aunque se considera que esto aún es insuficiente para prepararse ante emergencias que podrían ocurrir en un futuro cercano.
El ejercicio también prevé el transporte de personal de las SDF herido en combate hacia instalaciones médicas en Naha, en la isla principal de Okinawa. Los casos que requieran tratamiento más avanzado serían trasladados a un hospital de las SDF en la prefectura de Saitama, cerca de Tokio.
Además de los ejercicios de evacuación, «Keen Sword» incluye simulacros de defensa de islas, defensa antimisiles y actividades en áreas emergentes como el espacio, el ciberespacio y la guerra electrónica. Cazas furtivos F-22 y F-35 de EEUU se han desplazado a la base aérea de Nyutabaru de las SDF para llevar a cabo entrenamientos de combate.
Tanto EE.UU. como Japón han intensificado su cooperación en todos los niveles, desde la planificación hasta la ejecución, basada en un acuerdo alcanzado durante una cumbre en abril para mejorar la coordinación en el control y comando conjunto. (RI/NI/IP/)
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