La moneda japonesa sufrió hoy un fuerte retroceso en el mercado de divisas de Tokio, alcanzando los 148,29 yenes por dólar a las 17:00 horas, lo que representa una caída de 1,99 yenes frente a los niveles de cierre de la semana pasada. Este movimiento fue impulsado por la disminución de las expectativas de una drástica bajada de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, luego de que se conocieran datos positivos sobre el empleo en el país.
El viernes, el informe de empleo de septiembre mostró un crecimiento notable en las contrataciones del sector no agrícola, superando con creces las previsiones del mercado.
Además, la tasa de desempleo descendió respecto al mes anterior, mientras que el incremento de los salarios medios también fue superior a lo esperado. Estos datos refuerzan la percepción de que la economía estadounidense sigue resistiendo, lo que ha llevado a los inversores a descartar una bajada de tipos de hasta un 0,50% por parte de la Fed en su reunión de noviembre.
A raíz de este escenario, los rendimientos de los bonos a largo plazo en EEUU se elevaron, aumentando la diferencia con los tipos de interés en Japón. Esto provocó un aumento de las ventas de yenes, consideradas como una apuesta de bajo riesgo, y la compra de dólares, reforzando aún más la tendencia del yen a la baja.
En la mañana, el yen llegó a cotizar en torno a los 149,10 yenes por dólar, su nivel más bajo desde el 16 de agosto. No obstante, hacia las 16:30, logró una leve recuperación hasta los 148,16 yenes. Esto se debió a las caídas en los futuros del Nikkei en las operaciones fuera de horario, lo que provocó un aumento de la demanda del yen, considerado un activo refugio en tiempos de incertidumbre. La compra de yenes por parte de empresas exportadoras japonesas también ayudó a limitar las pérdidas.
Frente al euro, el yen también experimentó una depreciación, situándose en 162,64 yenes por euro a las 17:00, con una caída de 1,31 yenes frente a la jornada anterior. (RI/IP)