Kabir Mahmudul, un profesor bangladesí de 49 años que reside en Japón, conducía su automóvil el 23 de diciembre en la ciudad de Akita cuando vio a un hombre vestido con ropa ligera, agachado en una acera y con bolsas de compras en las manos. Estaba nevando.
Era una escena inusual.
Intuyendo que algo estaba mal, el hombre se detuvo y le preguntó al transeúnte, aparentemente un octogenario, si estaba bien, revela Mainichi Shimbun.
Kabir, profesor en la Universidad de Akita, se ofreció llevarlo a casa. El anciano, sin embargo, no recordaba dónde vivía.
Así las cosas, el profesor de la Universidad de Akita lo llevó a una estación de policía, conduciendo durante unos 40 minutos.
La policía localizó después a la familia del anciano.
Más adelante, la policía local se puso en contacto con el bangladesí para entregarle un certificado de reconocimiento por su buena acción. Kabir no aceptó, le parecía demasiado.
“Solo he hecho lo que debería haber hecho, ya que estoy en deuda con tanta gente en Japón por su amabilidad”, pensó.
Sin embargo, finalmente decidió aceptar el premio. Hubo gente de su entorno que le dijo que eso podría inspirar a sus estudiantes y otras personas a ayudar como él lo hizo.
Kabir, que estudió becado en Japón cuando era joven, recibió la distinción el 18 de enero.
La policía subrayó el hecho de que es muy raro que se otorgue a un extranjero un reconocimiento como el que recibió el bangladesí. (International Press)