La famosa cadena de tiendas por departamentos Takashimaya realizó ayer su primera conferencia de prensa en Tokio y volvió a pedir disculpas por las tortas de Navidad congeladas que fueron vendidas por Internet y que llegaron a los clientes deformadas. La tienda no supo determinar la causa que originó el problema.
La empresa dijo que, de los 2.879 tortas de fresa y crema chantillí vendidas, 807 se desarmaron durante la distribución con datos recogidos hasta la noche del 26, desde Hokkaido hasta Okinawa.
Aunque Takashimaya afirmó que no había problemas en el proceso de fabricación ni en la gestión de la temperatura durante el envío, concluyeron que «después de una revisión exhaustiva, es imposible identificar una causa específica».
Al principio de la conferencia, el director ejecutivo de la tienda, Kazuhisa Yokoyama dijo: «Lamentamos profundamente haber decepcionado las expectativas de muchos de nuestros clientes y causado preocupación a numerosos consumidores. La responsabilidad total hacia nuestros clientes y la incapacidad de establecer un sistema de gestión que pudiera identificar la causa recae en nuestra empresa», y bajó la cabeza durante unos 10 segundos.
PROBLEMA DE CONFIANZA
No obstante, los afectados quedaron descontentos con las explicaciones de la tienda. «Si la causa permanece desconocida, será difícil pedir alimentos a Takashimaya en el futuro», se leyó en las redes.
En declaraciones a Nippon TV, Tatsuya Kakita, un experto en seguridad alimentaria, dijo: «El problema más grande es que si la causa no se aclara lo mismo podría suceder el próximo año. Podría convertirse en un problema de confianza, así que espero que se investigue».
Uno de los supervisores de la torta navideña de Takashimaya, Kenzen Watanabe, expresó el momento que se vive en la pastelería donde se hizo el producto: «También me esforcé mucho y cuando pregunté en la fábrica, me dijeron que las personas que trabajaron duro en este producto estaban llorando sin saber qué ha pasado. Los clientes son las mayores víctimas».
1.200 QUEJAS POR LAS TORTAS
Las quejas y consultas de los compradores habían alcanzado 1.207 casos hasta anoche del martes.
La torta de fresa, fabricada por una pastelería de Hanyu, Saitama, y vendida por Takashimaya como un producto exclusivo para Internet por 5.400 yenes con impuestos incluidos, tuvo una compra anticipada de unas 2.900 unidades.
El año pasado las tortas permanecieron congeladas durante dos semanas antes de su entrega y no se registraron problemas. Este año, la llegada de las fresas se retrasó y el tiempo de preparación se redujo a 20 o 25 horas, pero las pruebas de la fabricante mostraron que estaban congeladas a la temperatura especificada.
Yamato Transport, contratado por Takashimaya, las entregó congeladas a los compradores entre el 22 y el 25 de diciembre. Sin embargo, las redes sociales pronto se llenaron de publicaciones con fotografías que decían «la torta está completamente destrozada».
Takashimaya está contactando a todos los compradores para disculparse y está ofreciendo reembolsos u otras compensaciones a aquellos cuyas tortas navideñas llegaron desmoronadas. (RI/International Press)