En 2022, un hombre de ancestros coreanos fue rechazado por un club de golf en la prefectura de Gifu.
Pese a que el hombre tiene la nacionalidad japonesa desde 2018, el Aigi Country Club decidió no aceptarlo como miembro por su origen coreano.
Así las cosas, presentó una demanda y este mes el Tribunal Superior de Nagoya falló a su favor, informa Asahi Shimbun.
El club deberá pagarle una compensación de 770.000 yenes (5.143 dólares).
El tribunal tachó como discriminación racial la decisión de no admitirlo debido a su origen coreano.
El rechazo viola el artículo 14 de la Constitución japonesa (que establece la igualdad ante la ley) y la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial.
Si bien el artículo 21 de la Constitución garantiza la libertad de asociación, el club, que tiene alrededor de 1.500 miembros, es una “organización social”, condición que establece “ciertos límites” a su poder discrecional para seleccionar a sus integrantes, según el tribunal.
En su fallo, el tribunal también hizo hincapié en que el demandante ha enfrentado prejuicios y discriminación durante su vida en Japón. (International Press)