De las 42.000 personas que residen en la ciudad de Oizumi, prefectura de Gunma, alrededor de 8.300 son extranjeras, casi el 20 % del total.
Para involucrarlos más en la comunidad, la ciudad eliminaría el requisito de la nacionalidad japonesa para los empleos regulares en el municipio, resalta Mainichi Shimbun.
La medida entraría en vigor en el año fiscal 2025.
Habrá límites, sin embargo, si el plan se aprueba.
Los residentes extranjeros no podrán, por ejemplo, ocupar puestos directivos y tareas que requieran ejercer la autoridad pública, como la imposición y recaudación de impuestos.
¿Qué sí podrán hacer si la iniciativa obtiene luz verde? Trabajo general de oficina, gestión de parques y reparaciones de carreteras, etc.
Oizumi apunta a que participen en labores de gestión cívica para contribuir a mejorar los servicios destinados a los propios extranjeros
“Hay varios obstáculos, pero debemos dar un paso adelante”, dijo el alcalde Toshiaki Murayama en referencia al plan.
Si finalmente se materializa, Oizumi será pionera en Gunma.
Otras ciudades de Japón, como Kobe y Toyota, en las prefecturas de Hyogo y Aichi, respectivamente, ya tienen a extranjeros como trabajadores regulares en sus municipios. (International Press)
