En abril pasado, un ciudadano extranjero acudió a la oficina municipal de la ciudad de Hino, Tokio, para completar los trámites de mudanza. La persona recién había llegado del extranjero.
El funcionario que lo atendió verificó su identidad en un sistema de registro de residentes extranjeros, donde encontró el nombre de otro extranjero, que se llamaba igual y había nacido la misma fecha (aunque vivía en otra ciudad).
El empleado, por error, le asignó al ciudadano que estaba atendiendo el número de identificación de la tarjeta My Number de la otra persona, revela Mainichi Shimbun.
El malentendido se descubrió en agosto, cuando un funcionario de la ciudad donde vive el otro extranjero se puso en contacto con el municipio de Hino.
Hino ha suspendido temporalmente la tarjeta My Number del extranjero que reside en su territorio. Sin embargo, no ha podido contactarse con su homónimo. (International Press)
