El Ministerio de Finanzas de Japón reportó hoy datos alarmantes sobre la incautación de productos falsificados en el país durante el primer semestre de 2023.
El número de artículos confiscados ha alcanzado la cifra de 15.536, marcando un aumento del 23,7% en comparación con el mismo período del año anterior. Este aumento ha llevado la incautación de productos falsificados a un nivel no visto en tres años y el tercero más alto registrado en la historia reciente.
Este preocupante aumento en la incautación de productos falsificados se atribuye, en gran medida, a la reciente intensificación de las regulaciones de importación en un esfuerzo por proteger los derechos de propiedad intelectual. Entre los productos falsificados que han proliferado en el mercado japonés se encuentran los cartuchos de cigarrillos electrónicos y otros productos relacionados con la salud.
Por categorías de productos, la ropa encabeza la lista con 5.041 artículos incautados, representando el 28.1% del total. Le siguen los bolsos con 4.292 artículos y los teléfonos móviles y sus accesorios con 2.618 artículos.
Por la procedencia de estos productos falsificados, China lidera la lista con un total de 12.647 artículos, lo que representa el 81.4% del total incautado.
En términos de cantidad, los productos relacionados con el tabaco y los dispositivos para fumar han experimentado un crecimiento excepcional, con un aumento de 758 veces en comparación con el mismo período del año pasado, alcanzando un total de 78.064 unidades. También se ha observado un aumento en la incautación de productos farmacéuticos que representan un riesgo para la salud pública.
En cuanto a la procedencia de estos productos falsificados, China lidera la lista con un total de 12.647 artículos, lo que representa el 81.4% del total incautado. También se han detectado numerosos productos falsificados provenientes de países como Vietnam y Tailandia.
El Ministerio de Finanzas ha reforzado las regulaciones de importación incluso para productos falsificados destinados al uso personal que son adquiridos en el extranjero a partir de octubre de 2022. Esto significa que, independientemente del propósito de la importación, estos productos pueden ser confiscados por las autoridades aduaneras. (RI/NI/IP/)
