El pueblo de Abu, ubicado en la prefectura de Yamaguchi, había hecho los arreglos correspondientes para transferir este mes 100 mil yenes (777 dólares) a 463 hogares que habían solicitado ayuda pública.
El dinero forma parte de un programa de apoyo del gobierno de Japón a familias de bajo ingresos para mitigar el efecto de la pandemia de coronavirus en sus ingresos.
Por error de un funcionario local, que consignó como beneficiario de la ayuda a una sola persona en la documentación que entregó al banco encargado de las transferencias, el individuo recibió el monto total, 46,3 millones de yenes (360 mil dólares), en su cuenta bancaria.
Al principio, parecía que el problema se resolvería sin dilaciones. La persona que recibió la millonaria suma expresó su voluntad de devolver el dinero.
Sin embargo, las autoridades locales perdieron el contacto con la persona. Cuando por fin pudieron localizarla, les dijo que no podía devolver el dinero porque ya lo había “movido a otro lugar”.
«No voy a huir y estoy dispuesto a pagar por mi acto inmoral», dijo, según Mainichi Shimbun.
El municipio no se ha quedado de brazos cruzados. Carece de autoridad para verificar las operaciones bancarias de la persona aludida, pero ha acudido a la policía de Yamaguchi, así como a abogados, en busca de ayuda.
El alcalde de la ciudad calificó como “extremadamente lamentable” el incidente y prometió esforzarse al máximo para remediar el problema. (International Press)
