El Consejo de Seguridad de la ONU celebrará hoy, a petición de Moscú, una reunión de urgencia para tratar la denuncia de “actividades militares biológicas de Estados Unidos en territorio de Ucrania”.
Moscú hizo la solicitud después de que el gobierno estadounidense rechazara las acusaciones que esta semana lanzó la portavoz del Ministerio del Exterior de Rusia, Maria Zakharova, sin presentar evidencia, de que Estados Unidos ha puesto en marcha un programa de armas químicas con 26 laboratorios involucrados en la «fabricación de virus peligrosos» como el ántrax o el cólera.
Al mismo tiempo, el Ministerio de Defensa ruso sostuvo que los «nacionalistas ucranianos» tramaban ataques con armas químicas en Jarkov, la segunda ciudad de Ucrania, con la intención de acusar falsamente a Rusia de usar armamento biológico.
No obstante, Moscú ya usó las mismas acusaciones para justificar la invasión de la región de Donbass al inicio de la guerra. Antes, en 2018 Rusia también había acusado a Estados Unidos de realizar en secreto experimentos químicos en un laboratorio en Georgia, otra antigua república soviética que, al igual que Ucrania, quiere ingresar a la Unión Europea y se acercó a la OTAN.
En este tema, China aprovechó para atizar el fuego a favor de Moscú. «Los laboratorios biológicos de Estados Unidos en Ucrania han creado una gran preocupación. De acuerdo con lo publicado por varios medios, estos laboratorios almacenan grandes cantidades de patógenos», advirtió el portavoz del Ministerio de Exteriores chino Zhao Lijian.
¿QUÉ PRETENDE RUSIA CON SU DENUNCIA?
Entre tanto, desde el miércoles de esta semana, Estados Unidos y Reino Unido han considerado sospechosa la manera en que Rusia ha montado su acusación sobre armas químicas en Ucrania, en momentos que busca justificar desesperadamente la guerra ante su pueblo y sufre muchas pérdidas en su operación militar.
«El reciente torrente de mentiras de Rusia, en un intento de justificar la guerra premeditada e injustificada contra Ucrania, debería dejar claro, de una vez por todas, que no se puede confiar en Rusia para hablar del uso de armas químicas por el caso en Siria», señaló.
Ayer, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, señaló que Moscú tiene «un largo historial bien documentado» de uso de ese tipo de armamento y recordó el apoyo al régimen de Bashar al Assad en Siria donde según organismos independientes pudieron haberse realizado más de 100 ataques con agentes químicos contra tropas opositoras.
Psaki, advirtió sobre la posibilidad de que Rusia también esté preparando el terreno para usar armas químicas o biológicas en su guerra en Ucrania.
LA POSICIÓN DE REINO UNIDO
«Rusia ha difundido repetidamente desinformación sobre el uso reiterado de armas químicas por parte de Siria», dijo a Associated Press el embajador adjunto de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Richard Mills.
Durante los últimos diez días, «Rusia ha continuado su guerra de agresión contra Ucrania, asediando ciudades, matando a civiles de forma indiscriminada y obligando a millones de personas a huir para ponerse a salvo», indicó el embajador británico ante Naciones Unidas, James Kariuki.
«Los paralelismos con la acción rusa en Siria son claros» y «la comparación se extiende también a las armas químicas, ya que vemos el conocido espectro de la desinformación rusa», añadió. (AG/RI/NI/)
