Los osos, cuando ingresan a zonas urbanas en Japón, pueden ser un grave problema. En el peor de los casos, matan a seres humanos. También pueden herirlos de gravedad.
Y aunque no causen daño a personas, pueden provocar perjuicios económicos, como el que sufrió un mall en la prefectura de Ishikawa, que hace unos días tuvo que permanecer cerrado todo el día debido a la presencia de un oso.
Para repeler a estos animales, sin necesidad de matarlos (en el caso del oso de Ishikawa, un cazador le quitó la vida), la ciudad de Takikawa, en la prefectura de Hokkaido, ha instalado lobos mecánicos, revela el portal SoraNews24.
El denominado “Monster Wolf”, fabricado por la compañía Ohta Seiki, está equipado con sensores infrarrojos que detectan la presencia de un animal.
Cuando los sensores se activan, la cabeza del “monstruo” gira, sus ojos LED se encienden de rojo (como en una película de terror) y emite fuertes ruidos.
Monster Wolf tiene un arsenal de aproximadamente 60 ruidos diferentes: de disparos, aullidos de lobo, voces humanas, etc.
De esta manera, no solo se logra ahuyentar al animal, sino también se evita hacerle daño.
Hasta el momento, el invento ha funcionado, pues nadie ha vuelto a ver osos en la ciudad japonesa. Ante los buenos resultados, las autoridades de Takikawa planean extender su uso. (International Press)
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