El gobierno de Japón evalúa hacer públicos los nombres de las compañías que emplean de manera ilegal a aprendices extranjeros que abandonaron los lugares de trabajo a los que inicialmente habían sido destinados para recibir capacitación, informó Jiji Press.
La medida forma parte de un conjunto de políticas de la Agencia de Servicios de Inmigración de Japón para evitar la fuga de los practicantes.
Entre enero y junio de 2019, 4.499 aprendices extranjeros huyeron de las compañías donde hacían prácticas, 256 años más que en el mismo periodo del año pasado.
El programa de capacitación técnica, impulsado por el gobierno de Japón, fue implementado en 1993 con el fin de reclutar a jóvenes extranjeros para que reciban formación laboral en determinados campos durante un periodo. Al finalizar este, deben volver a sus países de origen y aplicar los conocimientos adquiridos en Japón.
Sin embargo, el programa es utilizado a menudo como fuente de mano de obra barata en medio de la escasez de trabajadores que afecta a Japón.
Muchos aprendices extranjeros no realizan tareas que en teoría deberían hacer como parte de su capacitación, trabajan en duras condiciones o no les pagan.
Ante los abusos que sufren y la necesidad de pagar las abultadas deudas que han contraído para poder viajar a Japón, los practicantes desertan en busca de trabajos mejor pagados. Las compañías que emplean a los extranjeros que han huido infringen la ley al hacerlo.
Otra de las medidas que figuran en el paquete de la agencia gubernamental es la imposición de sanciones a todas las organizaciones involucradas en el empleo de los aprendices (aquellas en sus países de origen que los envían a Japón, así como los organismos de supervisión y las compañías donde se capacitan en Japón) si son consideradas responsables de la fuga de los practicantes.
Las organizaciones aludidas pueden perder el permiso para recibir a nuevos aprendices. (International Press)
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