Este mes, murieron cuatro ancianos en un hogar de cuidados especiales en la prefectura de Akita, y siete en un asilo en la prefectura de Hyogo.
Las once personas habían contraído la infuenza en medio de una infección generalizada.
Por ello, el Ministerio de Salud de Japón ha emitido una advertencia con carácter de urgencia a nivel nacional para que los centros que acogen a personas de avanzada edad tomen medidas para prevenir la influenza, informó la NHK.
¿Qué medidas? Por ejemplo, chequear a menudo la salud de los residentes porque las personas mayores tienen poca resistencia al virus, sobre todo cuando viven en grupos donde las infecciones tienden a diseminarse.
O exigir a las personas que entran y salen de las instalaciones que se laven las manos y usen mascarillas con el fin de impedir que el virus penetre desde el exterior.
Las autoridades sanitarias hicieron hincapié en que cuando las personas mayores se contagian suelen tener síntomas graves. (International Press)
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