Los escándalos han obligado a compañías como Japan Airlines y All Nippon Airways a investigar el tema.
Poco a poco, van saliendo a la luz diversas irregularidades.
JAL reveló que uno de sus pilotos evitó las pruebas de alcohol antes de los vuelos 110 veces, según Kyodo.
Desde el verano de 2017, el hombre realizó 180 vuelos. Solo en 70 se sometió a los tests.
El capitán de 52 años se justificó diciendo que las regulaciones de JAL no estipulaban las pruebas de alcohol.
En realidad, las pruebas de alcohol no son obligatorias en Japón. Tampoco hay un límite legal establecido para su consumo.
JAL también descubrió que en 49 casos sus copilotos no se sometieron a los tests.
La aerolínea japonesa aún no ha decidido cómo sancionar a los involucrados.
Otro caso, aunque protagonizado por una aeromoza. A principios de semana, se detectó un alto nivel de alcohol en una azafata. Ella negó haber bebido y no se le encontró alcohol antes de un vuelo, pero dos tripulantes notaron su aliento a alcohol y le exigieron que se sometiera a otro test.
La prueba halló un 50 % más del límite establecido por JAL para permitir que los pilotos suban a los vuelos. Sin embargo, no existen reglas específicas para azafatas.
En octubre, un copiloto de JAL fue arrestado en Londres tras descubrirse que su consumo de alcohol superaba en unas diez veces el tope legal. El hombre fue sentenciado a diez meses de prisión.
(International Press)
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