Ante el reinicio de las clases en los colegios tras las vacaciones de verano y con el delincuente aún suelto, se ha reforzado el cuidado de los niños que van a la escuela, informó la NHK.
Además de los voluntarios que supervisan que los menores lleguen a salvo a clases, la policía participa en las labores de vigilancia.
El martes, un grupo de policías estuvo en una zona, cerca de una escuela, donde Hida habría robado bolsos tras darse a la fuga.
Algunos policías saludaban a los niños que llegaban al colegio, mientras que otros patrullaban el lugar a bordo de coches.
Además, padres, profesores y residentes trabajarán de manera conjunta para proteger a los niños, según el subdirector.
Las medidas de seguridad se mantendrán por el momento. (International Press)
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