El 7 de julio de 1996, Yukari Yokoyama, una niña de cuatro años, fue secuestrada en una sala de pachinko en la ciudad de Ota, prefectura de Gunma. Nunca más se volvió a saber de ella.
Yukari fue a la sala de pachinko con su padre. La niña desapareció después de alejarse de su papá. El sospechoso de habérsela llevado es un hombre con gafas de sol y una gorra, captado por una cámara de seguridad del establecimiento recorriendo los pasillos del pachinko sin jugar durante unos 15 minutos. El sujeto fue visto hablando con la niña. Sin embargo, nunca ha podido ser localizado.
22 años después, sus padres continúan buscándola. El sábado repartieron volantes al público frente a un centro comercial con la esperanza de que alguien tenga información que conduzca a su hallazgo.
Los padres de Yukari estaban acompañados por policías y alrededor de 70 voluntarios, reveló Japan Today.
«Siento dolor porque no he podido encontrar a mi hija durante 22 años. Todavía me pregunto todos los días por qué fui al pachinko ese día. Nunca ha habido algo tan doloroso para mí», dijo el padre, Yasuo (51).
Por su parte, la madre, Mitsuko, dijo: «No hay un día que pase sin que yo piense por qué no tenemos ningún rastro de su paradero. Cuando pienso en los años que han pasado, no puedo dejar de preguntarme por qué (ella todavía está desaparecida). Desde ese día, nunca he pensado en Tanabata (7 de julio) como un día hermoso».
Desde 1996, la policía ha recibido más de 3.900 llamadas del público con respecto a la desaparición, pero ninguna ha conducido a nada. Lo único concreto que existe son las imágenes del sospechoso.
Cualquier información llamar a 0276-33-0110. (International Press)
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