El exmarine Kenneth Franklin Shinzato (33), que asesinó a una joven okinawense de 20 años en abril de 2016 cuando era empleado civil de una base estadounidense, dijo que no tuvo intención de asesinarla.
Shinzato está siendo juzgado en el Tribunal de Distrito de Naha, informó Mainichi Shimbun.
El exsoldado dijo que era inocente de la acusación de asesinato, pero admitió haber cometido violación con resultado de muerte y abandono de cadáver.
Shinzato afirmó que su intención era golpear a la mujer para dejarla inconsciente, llevarla a un hotel, violarla y luego dejar que se vaya, pero que las cosas no salieron como pensaba y entró en pánico.
La defensa sostuvo que el sujeto golpeó a la mujer con una barra y la estranguló, pero sin intención de matarla, motivo por el cual no puede ser acusado de asesinato, y negó que el hombre haya acuchillado a la víctima.
La fiscalía aseguró que Shinzato urdió un plan para violar a una mujer. Condujo por la ciudad de Uruma con una barra, un cuchillo y una maleta en busca de un objetivo. Vio a la víctima, que caminaba sola, la atacó y la asesinó.
Por temor a ser descubierto, el hombre colocó el cuerpo en la maleta, lo puso en su coche, condujo y arrojó el cadáver en una zona boscosa en el pueblo de Onna y le echó tierra encima. Se deshizo de la barra, el teléfono de la víctima y otros objetos en un río cercano y dejó la maleta en una instalación militar estadounidense.
Además de golpear a la chica con una barra y estrangularla, la apuñaló varias veces, según la fiscalía. (International Press)
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