El primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, expresó hoy su preocupación ante un posible conflicto en la región tras la amenaza de Corea del Norte de bombardear las bases militares de Estados Unidos en Guam.
«Un conflicto sería devastador. Tendría catastróficas consecuencias. Todos entendemos eso», dijo a la prensa Turnbull, que culpó al régimen de Kim Jong-un y su programa balístico y nuclear de suponer una amenaza a la región.
«Ellos son los que actúan ilegalmente, en contra de numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Su régimen, su conducta ilegal es temeraria, provocadora, peligrosa y amenaza a la paz de la región», añadió.
Turnbull hizo las declaraciones después de que Corea del Norte amenazara con atacar las bases en Guam, de que el presidente de EEUU, Donald Trump, elevara el tono de sus advertencias a Pyongyang y de que el Pentágono enviara de nuevo bombarderos B-1B a la península.
Un portavoz del Ejército norcoreano aseguró que el país asiático analiza un «plan operativo de fuego envolvente» en torno a Guam con misiles de alcance medio largo Hwasong-12 para contener las bases de EEUU en esa isla del Pacífico, según un comunicado de la agencia estatal KCNA.
La ministra de Exteriores de Australia, Julie Bishop, aseguró que cualquier amenaza de conflicto es «profundamente perturbadora» y dijo que si un misil norcoreano es capaz de alcanzar EEUU como asegura el régimen de Pyongyang, también es capaz de llegar hasta territorio australiano.
Bishop hizo un llamamiento a la tranquilidad y abogó por la implementación de forma colectiva y en su totalidad de las últimas sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU para forzar a Corea del Norte a abandonar su programa nuclear.
Desde enero Kim Jong-un ha ordenado y supervisado el lanzamiento de catorce misiles, dos de ellos, los del 4 y 28 de julio pasados, con alcances intercontinentales y, por lo tanto, con capacidad de impactar en territorio estadounidense.
No obstante, un hipotético lanzamiento de un misil nuclear norcoreano se tendría que topar con el sistema de interceptores que EEUU tiene en el Pacífico.
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