Antonio Broto / EFE
El tiempo ha enterrado un poco en el olvido el hito histórico, pero lo cierto es que Wham!, el dúo formado por George Michael y Andrew Ridgeley, fue el primer grupo de pop y rock occidental que tocó en la China comunista, un país entonces aún muy cerrado al exterior.
Ridgeley y Michael, fallecido este domingo a la edad de 53 años, dieron dos conciertos en Pekín y Cantón, en abril de 1985, cuando Wham! estaba en la cúspide de su fama.
Wham! era conocido por muy poca gente en China antes de su gira -algunos habían oído sus éxitos a través de la radio de Hong Kong, o en casetes de amigos extranjeros que estudiaban en las universidades de Pekín-, pero el representante del dúo, Simon Napier-Bell, se embarcó personalmente en el reto de llevarlos al gigante asiático.
Napier-Bell quería que el dúo pudiera colgarse la medalla de ser el primer grupo occidental en llegar a China, como así fue, y para ello tuvo que reunirse con decenas de líderes chinos con el fin de convencerles de que llevar a Wham! al país daría una buena imagen del régimen comunista, que entonces empezaba tímidamente a abrirse.
La misión no fue fácil: Napier-Bell tardó casi dos años de gestiones en conseguir el visto bueno de Pekín, y para ello tuvo que reunirse con 143 miembros del Gobierno chino, a menudo en interminables banquetes de negocios.
El empresario contó esta «hazaña» en un libro publicado en 2005, con ocasión del 20 aniversario de los conciertos, y que tituló precisamente «Te voy a invitar a comer», en recuerdo de aquellos meses de almuerzos con los líderes chinos.
Napier-Bell relató en esa obra que las negociaciones fueron una suerte de carrera contrarreloj para evitar que Queen, otra célebre banda inglesa interesada entonces en tocar en China, llegara antes que Wham!
Para ello, en las reuniones con líderes comunistas algo temerosos por traer a artistas de pelo largo y bailes insinuantes a una China aún muy tradicional, el representante de Wham! mostraba fotos del dúo, con aspecto de buenos chicos, junto a otras del irreverente Freddy Mercury, para que compararan y optaran por su grupo.
Queen y otras bandas interesadas entonces en probar el exotismo de una gira por China, como los Rolling Stones, finalmente abandonaron sus planes: Mick Jagger debutó en el país asiático mucho más tarde, en 2006, y el grupo de Mercury lo hizo recientemente, en septiembre de este año, con su líder y fundador ya fallecido hace un cuarto de siglo.
Finalmente, Wham! desembarcó en China en la primavera de 1985, y su primer concierto en Pekín, organizado en el Gimnasio de los Trabajadores y con 15.000 espectadores, se celebró en una atmósfera algo enrarecida por la fuerte presencia policial.
En el primer piso del palacio de deportes, el público -entre el que había muchos funcionarios gubernamentales a los que les habían regalado las entradas- estaba sentado y casi sin moverse por miedo a la policía.
En contraste, en el palco, algo más libre de vigilancia, los espectadores, entre ellos fans extranjeros, bailaban con desenfreno, aplaudían y cantaban a grito éxitos de Wham! como «Careless Whisper» o «Wake Me Up Before You Go-Go».
La entrada al concierto en Pekín costaba cinco yuanes (unos 70 centavos de dólar), un precio que hoy en día sería irrisorio pero entonces era muy alto para el bolsillo medio de los chinos.
A los asistentes se les regalaba un casete con éxitos de Wham! en una cara y versiones en chino de esas canciones a cargo de un cantante local, en las que a las letras se les había añadido algo de retórica comunista.
De la visita de Michael y Ridgeley a China también quedan curiosas fotografías del dúo en la Gran Muralla, donde sus pelos cardados y sus indumentarias ochenteras contrastan con el resto de visitantes, chinos vestidos en su mayoría aún con el traje Mao que les miraban con una mezcla de sorpresa y curiosidad.
Wham! consiguió actuar en una China que aún no se había recuperado de la Revolución Cultural y presumir con ello durante un tiempo de ser la banda más internacional del planeta, aunque al dúo le quedaban sólo unos meses de gloria, ya que se disolvería en 1986.
Be the first to comment