La Oficina de Inmigración de Japón busca el paradero de más de un centenar de extranjeros, entre ellos 13 brasileños, que tenían orden de deportación y que fugaron tras recibir un permiso de libertad provisional para solucionar situaciones especiales de salud.
Según NHK, los extranjeros con orden de deportación son detenidos hasta el momento de su salida del país, pero hay casos que el litigio civil de deportación se prolonga a solicitud del refugiado por padecer una enfermedad o necesidad de un tratamiento de salud.
En esos casos, por consideración humanitaria, Japón les concede el karihome, una libertad temporal con restricciones, como impedimento para trabajar y obligación de presentarse ante las autoridades constantemente, mientras solucionan su situación.
Sin embargo, la Oficina de Inmigración reveló que desconoce el paradero de 108 extranjeros que desde 2015 hasta agosto de este año recibieron el karihome y no volvieron a tener contacto con las autoridades.
Entre las personas no habidas se encuentran 14 filipinos, 13 brasileños, 12 de Sri Lanka entre otras nacionalidades. La mayoría de los extranjeros tenía orden de deportación por tener la visa vencida (ilegales), pero más de 10 de ellos habían sido condenados por robo, ataques sexuales y drogas.
La Oficina de Inmigración busca a estos extranjeros, muchos de los cuales se encontrarían trabajando dentro del país de forma ilegal. (International Press)
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