El extraño mercado del pelo femenino en Japón

A propósito del estudiante arrestado por cortarle 35 cm de cabello a una pasajera

Muestra de cabello femenino ofrecido por internet en Japón.

El arresto de un estudiante universitario que le cortó el cabello a una mujer en un tren en Nagoya para vender el mechón, de unos 35 centímetros de largo, en línea ha puesto el foco sobre un extraño mercado.

El estudiante fue pillado in fraganti en el tren por la policía, que había recibido reportes de alrededor de treinta incidentes similares en Aichi desde 2013. El hombre confesó que no era la primera vez que robaba cabello.


En un sitio de subastas en línea se pueden leer anuncios como este: “Cabello de estudiante de secundaria; suave y terso”. Hubo 14 ofertas a lo largo de 35 horas.

El ganador pagó 5.600 yenes (49 dólares) por una porción de pelo para “propósitos desconocidos”, según Asahi Shimbun.

¿Quién pagaría casi 50 dólares por cabello de mujer? ¿Para qué?


Asahi ha revisado el sitio subastas de Yahoo descubriendo que la venta de cabello puede ser un gran negocio.

El sitio muestra fotos de mujeres de cabello largo de espaldas o solo el pelo y sus respectivas descripciones. Por ejemplo: «Cabello de estudiante de koko; muy sedoso al tacto».

El cabello humano es muy utilizado para hacer pelucas de moda, así como para pacientes con cáncer. Los fabricantes de peluca en Japón se abastecen principalmente de distribuidores en países como China, no de subastas en línea.


Un representante de uno de los fabricantes declara a Asahi que jamás había escuchado que se adquiriera pelo a través de subastas por internet.

Así pues, la pregunta se mantiene en pie: ¿para qué se compra pelo humano?


Yahoo Japan afirma que no sabe qué hacen sus usuarios con los productos que compran en línea porque “eso no es asunto nuestro”.

¿Entonces? ¿Fetichismo? Por ahí parece ir la cosa. Un sitio web que vende porciones de cabello también comercializa ropa interior femenina usada.

«150 pelos” se venden a 1.620 yenes (14,23 dólares) y se recomiendan a “aquellos con un fuerte fetichismo del cabello».

Una esteticista explica que a la víctima del robo en Nagoya le tomará más de dos años y medio recuperar los 35 cm de pelo quitado.

«No es algo que se pueda reemplazar fácilmente. Algunas personas se dejan crecer el cabello para ocasiones especiales, como el Día del Adulto y las bodas. Es realmente espantoso». (International Press)

 

 

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