Si eres empleado del Ministerio de Salud de Japón y te tomas una pausa para salir de la oficina a fumar, ya no podrás retornar a tu escritorio de inmediato; no, antes tendrás que dar un breve paseo para quitarte el olor a tabaco de encima.
El Ministerio de Salud nipón decidió ponerse estricto con los fumadores después de recibir quejas tipo «cuando los empleados suben al ascensor en el segundo piso después de fumar, huelen mal».
Incluso ha trazado una ruta de vuelta a la oficina: a través de una escalera exterior y una puerta trasera, detalló Asahi Shimbun.
Además, el tiempo que podrás permanecer en la zona de fumadores al aire libre estará limitado.
El área de fumadores en el Ministerio de Salud en Tokio colinda con una sala de conferencias en el segundo piso de un ala del edificio gubernamental y a través de un pasillo conecta con otra ala.
El mal olor que dejan los fumadores frente a la sala de conferencias y en el pasillo ha motivado las quejas. A eso hay que sumarle que en el segundo piso funciona un ambiente para el cuidado de niños.
Los empleados no podrán usar la zona de fumadores de 9:30 a. m. a 3 p. m. excepto durante la hora del almuerzo. Además, tendrán prohibido fumar en el área de fumadores de otros ministerios y en el parque Hibiya, que está cerca del edificio.
Las restricciones pudieron ir más lejos, pues muchos empleados no fumadores querían una prohibición total. Un funcionario del Ministerio explicó que prefieren apostar por la gradualidad, dándoles a los fumadores la oportunidad de dejar el pernicioso hábito poco a poco (“un paso a la vez”).
Un experto en salud consultado por Asahi afirma que el humo del tabaco permanece en el aliento de los fumadores durante unos dos minutos y medio después de apagar su cigarrillo.
Las nuevas medidas entrarán en vigor el 10 de noviembre.
La iniciativa forma parte de una lucha integral contra el tabaquismo puesto en marcha por las autoridades japonesas con miras a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020. (International Press)
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