La víctima es una octogenaria que reside en Osaka
En Osaka se registró la mayor estafa (por el monto involucrado) a una persona en Japón: una octogenaria perdió 570 millones de yenes (5,18 millones de dólares) que le birló un grupo de estafadores.
A la anciana le hicieron creer que estaba implicada en un problema y que tenía que pagar una fuerte suma de dinero para resolverlo, según Mainichi Shimbun. El problema nunca existió.
La historia empezó a mediados de enero cuando un hombre que se identificó como empleado de una agencia de bolsa la llamó por teléfono para decirle que había realizado una transferencia de dinero a nombre de ella.
Varios días después, un hombre que aseguró ser empleado de una empresa farmacéutica le dijo que autorizar una transferencia de dinero prestando su nombre constituye un delito.
Más adelante, un hombre que dijo ser un funcionario de la Agencia de Servicios Financieros la llamó por teléfono para decirle que sus bienes podían ser confiscados, pero que si confiaba su dinero a un administrador se salvaría. El hombre presionó a la octogenaria para que le enviara dinero a una determinada dirección y ella cedió.
La mujer realizó más de 20 remesas entre febrero y mayo.
Solo se percató de que había sido estafada cuando recurrió a un allegado en busca de consejo, y decidió presentar una denuncia a la policía.
La mujer declaró a la policía que creía que si no enviaba el dinero para resolver el “problema” iba a causarle problemas a su familia. (International Press)
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