Destino turístico nació a partir de una historia de amor
(Fotos: www.town.shintomi.miyazaki.jp)
Una alfombra de flores de color rosa en el pueblo de Shintomi, prefectura de Miyazaki, atrae a miles de visitantes (hasta 7.000 entre marzo y abril, la etapa de florecimiento) cada año. Detrás de ellas hay una historia de amor de película.
El jardín, que deslumbra por la belleza de sus flores llamadas shibazakura, no nació, sin embargo, para ser un destino turístico, sino como una expresión de amor de un hombre a su esposa ciega, revela el sitio RocketNews24.
La pareja se apellida Kuroki. Se casaron en 1956 y dedicaron su vida a una granja lechera, donde tenían sesenta vacas. Con dos hijos, los Kuroki trabajaban duro para salir adelante. Su sueño era viajar por todo el país tras jubilarse. Como tantas parejas en Japón.
Sin embargo, tras 30 años de matrimonio, cuando la mujer tenía 52, comenzó a perder la visión por una diabetes. Hundida por la desgracia, se encerró en sí misma, apartándose del mundo. A su esposo le dolía que su antaño jovial mujer cayera presa de la tristeza, recluida en su casa. ¿Qué podía hacer él para animarla un poco?
Un día, Kuroki-san se fijó en una flor shibazakura en el jardín y se le prendió el foco: la belleza de las flores puede ser disfrutada no solo a través de la vista, sino también del olfato. Si creara un jardín lleno de flores, su esposa podría disfrutar de su belleza gracias a su aroma.
Además, el jardín atraería la atención de la gente, y mantener a su esposa en contacto con el mundo la ayudaría a abandonar su caparazón.
Así las cosas, Kuroki-san invirtió dos años en la creación de su hermoso jardín. Su esfuerzo ha sido fructífero. Su esposa ha recuperado la sonrisa. Hoy, los turistas visitan el jardín no solo para admirar sus flores, sino también para conocer a los Kuroki.
Flores y amor, insuperable combinación para las almas sensibles.
Dirección: Miyazaki-ken, Koyu gun, Shintomi, Nyuuta 17180-1
Sitio web: http://goo.gl/IAfBkZ
(International Press)
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