Nuevos juegos permiten participar a ancianos o personas con discapacidad
Siempre hay algo que inventar. Siempre. Sobre todo tratándose de los japoneses. Un grupo de investigadores en Japón está desarrollando deportes en el que puede competir cualquiera con el apoyo de la robótica y de tecnología asistida de vanguardia, revela Asahi Shimbun.
Cualquiera. No solo gente fuerte o veloz. También ancianos o personas con discapacidad. Y en igualdad de condiciones.
En octubre de 2014, el Comité de Deportes Sobrehumanos tuvo una reunión en la que Masahiko Inami, profesor de la Universidad de Keio, expresó el deseo de los participantes de celebrar un torneo deportivo sobrehumano con la mira puesta en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020.
El comité está compuesto por unos 40 miembros, entre ellos investigadores de robótica, ingenieros, exatletas profesionales y diseñadores de juegos.
Gracias a dispositivos de ayuda avanzados y tecnologías robóticas, incluso los niños o las personas que carecen de habilidades para el deporte pueden adquirir una «habilidad sobrehumana» y competir con atletas.
Sin embargo, aclara Inami en entrevista con Asahi, esto no significa que solo la tecnología determina el resultado.
Si fuera así, si vas a ganar solo gracias al apoyo tecnológico, no tendría sentido entrenar o esforzarse.
Por eso, Inami subraya la importancia de establecer normas equilibradas para que el esfuerzo y la habilidad del deportista también influyan en el resultado.
El experto ha desarrollado unas gafas especiales que muestran simultáneamente imágenes delante y detrás del usuario, tomadas con dos pequeñas cámaras que lleva en la cabeza.
Ambas imágenes se pueden mostrar en paralelo o superpuestas una sobre otra. De este modo, se amplía la percepción visual de quien lleva las gafas.
Por su parte, el investigador Takuya Nojima, profesor asociado de estudios de realidad virtual de la Universidad de Electro-Comunicaciones, está desarrollando un nuevo juego que combina el dodgeball (que consiste en darle con una pelota a los jugadores del equipo rival en un campo rectangular dividido por la mitad) y un juego de rol basado en la historia, en el que los jugadores son eliminados en serie.
Cada participante tiene un coeficiente de supervivencia. Al recibir un golpe con la pelota, se reduce la «supervivencia» del jugador. Cuando el coeficiente llega a cero debe abandonar el campo.
Para reducir las desigualdades, los jugadores con menor capacidad física tienen mayores niveles de rendimiento en defensa y ataque para que puedan seguir jugando incluso si son golpeados por la pelota.
El juego aún está en fase de prueba y Nojima se nutre de las opiniones de los jugadores para mejorarlo. (International Press)