El islam es una religión pacífica que no aprueba los asesinatos injustos, dicen
El domingo 1, un grupo de musulmanes que representan a las mezquitas en Japón se reunió en Tokio para orar por la vida de Kenji Goto, el periodista japonés asesinado por el Estado Islámico.
Cuando se difundió la noticia de que Goto había muerto, la sesión de oración se convirtió en un servicio en memoria del hombre de prensa.
«Es sumamente lamentable. Hemos trabajado por la liberación de Goto y del otro rehén, Haruna Yukawa», dijo Haroon Qureshi, un pakistaní de 48 años, en declaraciones recogidas por Mainichi Shimbun.
Qureshi, que se desempeña como secretario general de la organización Japan Islamic Trust, condenó al EI, cuyas acciones contrarían las enseñanzas del islam.
Otros musulmanes, también indignados, aseguraron que el islam es una religión pacífica que no aprueba los asesinatos injustos.
Por su parte, Syed Aminul Haque, un bengalí de 51 años que participó en una manifestación en solidaridad con Goto frente a la oficina del primer ministro de Japón, dijo que estaba triste y que lo hecho por el EI no tenía perdón.
Takehiko Tsukushi, un residente de Tokio que se unió al acto, comentó que albergaba “un hilo de esperanza” por la vida de Kenji y que creía que “si los extremistas entendían que estaba trabajando para los refugiados en las zonas de conflicto, le habrían perdonado la vida”. (International Press)