Japón es el segundo país, después de España, en número de personas que aprenden y practican este cante y baile
Tokio acoge desde el jueves la segunda edición de la Cumbre Flamenca de Japón, que reúne durante tres días a los mejores bailaores y cantaores nipones en lo que supone un reconocimiento del altísimo nivel del flamenco en el país asiático.
El maratón de 12 actuaciones en las que participan más de 40 músicos se vuelve a celebrar en la sede del Instituto Cervantes de Tokio con el cartel de entradas agotadas, con lo que se repite el éxito de público de la primera edición.
«Hay tanto nivel en el flamenco en Japón que hemos organizado una segunda cumbre sin que tenga que repetir ninguno de los artistas del primer año», explicó a Efe la gestora cultural del Cervantes en Tokio, Teresa Iniesta.
El evento arrancó con las actuaciones de la bailaora Mai Saegusa, de 32 años, discípula de «La China» y Farruquito, y el guitarrista Hiroshi Edo, de 37 años, y ganador del I Concurso de Guitarra Flamenca del Instituto Cervantes de Tokio.
Hasta el sábado, artistas consolidados como la bailaora Masami Okada, que fue solista del Ballet Nacional María Rosa, o el guitarrista Enrique Sakai, actuarán junto a jóvenes promesas o músicos españoles que han viajado hasta Japón para acompañarles.
La Cumbre Flamenca nació en 2012 con el objetivo de establecer un foro de encuentro para todos los artistas de este arte en Japón, un país que cuenta con 50.000 estudiantes y unas 80.000 personas vinculadas al mundo del flamenco.
Japón es el segundo país, por detrás de España, en número de personas que aprenden y practican este cante y baile, patrimonio de la humanidad desde 2010.
«Estos artistas llevaban años esperando un reconocimiento oficial como este por parte de España. Este el único evento de este tipo en Japón que se celebra vinculado a una institución española. Están muy agradecidos», apuntó Iniesta.
Como parte de la Cumbre, comisionada un año más por el pintor y cantaor Chiaki Horikoshien, se llevará a cabo un homenaje a la bailaora Yoko Komatsubara, considerada la pionera y responsable de introducir la enseñanza del flamenco en Japón.
Su reconocida academia de Tokio es la escuela de flamenco y baile español con más alumnos del mundo, al contar con 2.000 estudiantes. (EFE)