La mayoría son arrestadas por robos
El 27 % de las mujeres arrestadas el año pasado por delinquir tenía 65 años o más, la mayoría de ellas por robar, según un informe del Ministerio de Justicia, reportó Mainichi Shimbun.
En 2012, de las 60.431 mujeres atrapadas por las autoridades 16.503 tenía 65 años o más, y de ellas el 82 % había robado. El contraste es marcado con el caso de los hombres del mismo grupo de edad: solo el 47 % fue detenido por hurto.
¿Qué factores existen detrás de los delitos cometidos por ancianas?
Una mujer de 67 años relata a Mainichi sus inicios en la delincuencia.
Hace más de diez años, su esposo, del que había estado apartada durante quince años aproximadamente, la fue a buscar para decirle que estaba enfermo y pedirle que lo cuidara.
El hombre estaba postrado en cama y todos los días le entregaba una nota en la que indicaba qué deseaba comer. La mujer salía a trabajar y retornaba a casa con los pedidos de su esposo.
La anciana no comenzó a delinquir por necesidad. Le alcanzaba el dinero para mantener al hombre, pero comenzó a cuestionarse: ¿por qué tenía que cuidar de él? Enfadada, empezó a robar comida.
La tercera vez que lo hizo fue sorprendida por un empleado del local donde estaba, pero este no lo denunció. Sin embargo, la rabia era más fuerte que el temor a ser atrapada y volvió a robar.
Finalmente, fue arrestada por la policía y a los 65 años fue sentenciada a un año y medio de prisión.
A la distancia, la mujer admite que fue estúpida y que no estaba siendo racional cuando delinquía. Separada de su esposo, actualmente reside en un centro de rehabilitación en Tokio.
Tatsuya Ota, profesor de derecho de la Universidad de Keio, sostiene que no puede atribuirse el aumento de los delitos cometidos por personas mayores solo a dificultades económicas; la soledad, el aislamiento social y familiar, también influye. El experto afirma que se debe seguir de cerca a los ancianos que son excarcelados o que cumplen una condena suspendida para que no se aíslen.
