Las causas son la falta de trabajadores y la mala planificación
Casi un tercio del presupuesto destinado por Japón para la reconstrucción de las zonas afectadas por el tsunami de 2011 no ha se ha gastado todavía debido en parte a la mala planificación y la falta de operarios, según desveló la Junta Nacional de Auditoría nipona.
Este organismo ha cifrado en unos 6,48 billones de yenes (unos 48.652 millones de euros) el dinero que no ha sido movilizado de la partida total de 20 billones de yenes (147.537 de millones de euros) destinada a la reconstrucción del norte del país, informó hoy la cadena NHK.
Al no haberse gastado, la Junta explicó que este dinero restante será transferido a la partida para reconstrucción del año próximo o declarado innecesario.
El tsunami de 2011 destruyó cerca de 400.000 viviendas en la costa noreste del país, de las que aún quedan por retirar más de 27 millones de toneladas de escombros, mientras decenas de miles de personas siguen realojadas.
El presupuesto marcado para unos 130 proyectos no se ha utilizado en su totalidad durante los más dos años desde que ocurrió la tragedia y en más de una veintena de casos se han achacado los retrasos de dichos programas a la falta de ingenieros y operarios en la región.
Además, la planificación incorrecta o la falta de materiales también han afectado a otros 40 proyectos.
En total, un tercio de este dinero no gastado correspondía a subsidios abonados a corporaciones encargadas de realizar obras de reconstrucción en el noreste de Japón.
La Junta ha pedido a distintos ministerios que proporcionen más apoyo a las administraciones locales que sufren por estos retrasos en los proyectos de reconstrucción.
También les ha instado a que ayuden a evaluar correctamente el volumen de subvenciones que requieran estas empresas.
El devastador terremoto y tsunami del 11 de marzo en Japón dejó más de 18.000 muertos y desaparecidos y destruyó gran cantidad de edificios e infraestructuras básicas, además de provocar en la central de Fukushima Daiichi el peor accidente nuclear desde el de Chernóbil en 1986. (EFE)