Presión de Estados Unidos está funcionando
China está mostrando signos sutiles de que no desea agravar las tensiones con Japón, reveló Kyodo.
La intervención de Estados Unidos ha influido en la posición china.
Si bien Washington ha declarado su neutralidad con respecto al conflicto por las islas Senkaku, también reconoce la administración que Tokio ejerce sobre el archipiélago.
En abril, el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, visitó China y transmitió la posición de su país a las autoridades chinas.
El alto funcionario estadounidense subrayó que la alianza de seguridad entre Japón y EE. UU. abarca la defensa de las islas Senkaku e instó a las autoridades chinas a dialogar con Japón.
En apariencia, China no ha suavizado su postura, pues embarcaciones chinas siguen entrando en aguas de las islas Senkaku.
Sin embargo, ciertas señales indican lo contrario.
A principios de abril, funcionarios de Defensa de alto nivel de ambos países se reunieron por primera vez en diez meses con el objetivo de establecer un canal de comunicación bilateral rápido y eficaz en situaciones de peligro para neutralizar enfrentamientos armados.
Un mes antes, Pekín había expresado su voluntad de reanudar el contacto.
Las tensiones bilaterales se agudizaron a principios de año, cuando Tokio acusó a Pekín de que una fragata china había fijado en su radar como objetivo militar a una embarcación japonesa. Japón –según Kyodo– cree que el acto de provocación no tuvo la venia de las autoridades políticas chinas, y que el incidente inquietó a Pekín, pues podría conducir a un conflicto armado y, a la postre, a la intervención militar de Estados Unidos.
Esto llevó a China a buscar tender puentes con Japón. Aparentemente, los líderes políticos chinos están intentando frenar los ímpetus de sus militares.
Otro factor que está influyendo en la moderación china es la disminución de la inversión japonesa en China, lo que ha provocado la queja de los gobiernos locales.
Aunque estas señales no significan que la disputa territorial tenga pronto solución, al menos la situación no amenaza con empeorar.