Aletas del animal son amputadas para elaborar una popular sopa
Japón rechazará el acuerdo internacional propuesto recientemente por la Convención sobre el Comercio Internacional de Flora y Fauna (CITES) para regular las capturas y el comercio de tiburones, según adelantaron fuentes oficiales.
A pesar de que la población de escualos ha disminuido drásticamente en los últimos años debido al comercio de sus preciadas aletas, Tokio considera que no es necesario ampliar su regulación y que ésta debe seguir vinculada a los organismos ya existentes, detallaron las fuentes a la agencia Kyodo.
En este sentido, se espera que Japón rechace el acuerdo alcanzado el pasado mes de marzo en Bangkok durante la última convención del CITES, en el que se decidió ampliar el número de especies de tiburón protegidas.
En el marco del acuerdo alcanzado en Tailandia se impulsó además, con el apoyo de más de dos tercios de los países participantes, la necesidad de requerir permisos especiales a los países que realicen exportaciones de tiburones para reforzar el control.
Durante esa convención, el bloque de países asiáticos, liderado por China y Japón, ya adelantó que consideraba «inaceptable» la inclusión de las nuevas especies reguladas de tiburón, entre las que se encuentran el oceánico, el martillo común, el gigante, el cruz y el tiburón sardinero.
Con anterioridad, Japón ya ha rechazado otras decisiones de la CITES, como la prohibición de comerciar con diversas especies de ballenas y tiburones, como el blanco o el ballena, e incluso la relativa a la pesca de Caballitos de Mar, utilizados en Asia para elaborar medicamentos contra el asma o la disfunción eréctil.
Según organizaciones de defensa de los animales, entre 26 y 73 millones de aletas de tiburón pasan cada año por el mercado de Hong Kong, el primer destino mundial de este producto, para elaborar la popular sopa de aleta.
Además, los datos publicados en marzo por la CITES situaron a España como el mayor exportador de aleta de tiburón a Hong Kong, seguido de Singapur, Taiwán, Indonesia, Emiratos Árabes o Yemen.
En este sentido, una de las principales amenazas de los tiburones es la práctica conocida como «aleteo» o «desaleteo», que consiste en amputar las aletas del animal para posteriormente lanzar el resto de su cuerpo al mar.
El CITES es un acuerdo adoptado por 177 países bajo el que se han catalogado hasta el momento unas 35.000 especies de animales y plantas de cara a regular su comercio internacional para evitar que este afecte en su supervivencia. (EFE)