Es natural honrar a quienes sacrificaron sus vidas por el país, afirma
El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, defendió el derecho de los líderes políticos de su país de visitar el santuario de Yasukuni en una entrevista concedida a la revista Foreign Affairs.
«Creo que es bastante natural que un líder japonés ofrezca una plegaria por aquellos que sacrificaron sus vidas por su país, y no creo que esto sea diferente de lo que otros líderes del mundo hacen», declaró.
Abe hizo notar que un académico estadounidense sostiene que acudir al Cementerio Nacional de Arlington, donde yacen los restos de soldados de Estados Unidos caídos en combate, no significa avalar la esclavitud, pese a que miembros del ejército confederado están enterrados allí. “Yo soy de la opinión de que podemos establecer un argumento similar acerca de Yasukuni, que consagra las almas de aquellos que perdieron la vida al servicio de su país”, dijo.
Percibido por la comunidad internacional como un nacionalista que ha desplazado a Japón hacia la derecha, Abe aclaró su posición: «Yo he expresado varias veces el profundo remordimiento que comparto por el tremendo daño y sufrimiento que Japón causó en el pasado a la gente de muchos países, particularmente en Asia. Nunca he dicho que Japón no cometió una agresión”, subrayó.
El templo de Yasukuni honra a 2,5 millones de japoneses que murieron en combate, entre ellos 14 criminales de la Segunda Guerra Mundial.
En abril pasado, la visita de tres ministros del gobierno nipón al controvertido santuario provocó la indignación de China y Corea del Sur, que canceló un viaje que su ministro de Asuntos Exteriores tenía programado a Tokio.