Más de 40 por ciento de japoneses están indecisos, según Kyodo
La campaña electoral para los comicios generales adelantados del próximo 16 de diciembre arrancó hoy en Japón, donde las encuestas apuntan a que el gobernante Partido Democrático (PD) no renovará su mandato tras tres años en el poder.
Aunque el opositor Partido Liberal Demócrata (PLD) se sitúa a priori en los sondeos como el bloque que más votos cosecharía, muchos analistas no descartan la posibilidad de que obtenga una mayoría insuficiente y que se vea obligado a buscar una coalición de gobierno.
La última encuesta de la agencia Kyodo indica que el conservador PLD, liderado por el ex primer ministro Shinzo Abe, tiene la mayor tasa de apoyo (18,4 por ciento), aunque apunta a que el voto del gran volumen de indecisos (41,5 por ciento de los consultados) será fundamental para dibujar la composición de un nuevo Gobierno.
Los expertos subrayan que la reciente irrupción del Partido de la Restauración de Japón, liderado por el exalcalde de Tokio Shintaro Ishihara, como tercera fuerza política podría condicionar mucho unas hipotéticas negociaciones para formar Gabinete.
En el centro de la campaña electoral de los líderes de los 12 partidos que concurren a los comicios están la recuperación del crecimiento en la tercera economía del mundo, el futuro energético del país tras el accidente en la central nuclear de Fukushima o los conflictos territoriales con China y Corea del Sur.
El anuncio realizado el fin de semana por Corea del Norte de que planea lanzar un cohete de largo alcance este mes ha provocado que las siempre tensas relaciones con el vecino régimen comunista irrumpan también en la campaña.
Se prevé que unos 1.500 candidatos formalizarán hoy su candidatura para ocupar los 480 escaños de la Cámara Baja que estarán en juego.
Son los primeros comicios legislativos de Japón tras los de 2009, en las que el PD se impuso por mayoría y terminó con medio siglo de gobiernos casi ininterrumpidos del PLD.
La convocatoria de elecciones se anunció el pasado 14 de noviembre cuando el actual primer ministro, Yoshihiko Noda, decidió disolver la Cámara Baja.
Noda, cuyo partido mantenía un dominio parlamentario precario desde hace meses a causa de una escisión interna, se comprometió en verano a adelantar la cita con las urnas a cambio del apoyo de la oposición para aprobar una ansiada reforma fiscal. (EFE)