Comunidad italiana en Japón se une para apoyar a los damnificados

Italianos llevan comida y organizan actividades para recaudar fondos

Alrededor de 500 personas en la ciudad de Rikuzentakata, Iwate, pudieron disfrutar a principios de mes de pasta, sopa y vino gracias a la generosidad de destacados cocineros italianos de Tokio, reveló la agencia Kyodo.

Esta actividad llamada »Domenica Italiana» (Domingo Italiano) forma parte de la campaña benéfica »Italianos en Japón por el renacimiento de la región de Tohoku». 25 voluntarios entregaron alimentos y otros artículos de primera necesidad a los damnificados de la castigada ciudad.

»La gente disfrutó de la comida y algunos incluso preguntaron si podían llevarse las sobras», dijo Marco Staccioli, el impulsor del proyecto que involucra a la comunidad italiana en Japón. »En Italia, las familias se reúnen los domingos después de asistir a misa y comen alimentos preparados por las madres. Le pusimos el nombre a la actividad en honor a esa tradición», explicó.

Staccioli, director general de MS Japan Service, una empresa con sede en Saitama que importa y comercializa equipos para la reparación y el mantenimiento de automóviles, decidió apoyar a Rikuzentakata debido a que parientes de los vendedores de su empresa fueron afectados por la tragedia.

Staccioli, que llegó a Iwate cerca de dos semanas después del desastre acompañado por Cristina Morini, de la Asociación de Mujeres Italianas de Tokio, ha visitado la zona varias veces llevando alimentos, bicicletas y ropa, entre otras cosas.

La campaña lanzada por Staccioli (miembro de la Cámara de Comercio Italiana en Japón) y Morini ha recibido un amplio apoyo de los italianos que radican en el país.

La iniciativa es ahora promovida oficialmente por miembros de la Cámara, la Asociación de Mujeres Italianas y los clientes japoneses de MS Japan Service.

Staccioli reveló que tienen previsto celebrar la actividad »Domenica Italiana» cada mes hasta diciembre y que continuarán prestando apoyo a la reconstrucción de Rikuzentakata al menos por tres años.

El objetivo de la campaña ha pasado de ofrecer ayuda de emergencia a las víctimas a recaudar fondos para apoyar la reconstrucción de la ciudad. Con tal propósito, italianos en Japón han organizado eventos de caridad como conciertos, almuerzos y subastas.

Staccioli confesó que siente que sus “baterías se recargan” cada vez que visita la ciudad, ya que es alentado por algunas personas de Rikuzentakata que lo saludan en italiano. Además, dijo estar impresionado por los evacuados porque son “poderosos, fuertes y están bien organizados”.

»Es natural para los italianos dar caridad todos los domingos. Seguiremos uniendo fuerzas para ayudar a las personas que lo perdieron todo», enfatizó el empresario.