La fiscalía japonesa solicitó hoy la pena de muerte para el llamado «asesino de Akihabara», un hombre que hace dos años y medio mató a siete personas en ese populoso barrio de Tokio, famoso por sus tiendas de electrónica, manga y videojuegos.
Tomohiro Kato, de 28 años, confesó ser autor de esos siete asesinatos y de herir a otras diez personas porque estaba «cansado de la vida», y dijo que eligió ese barrio, en pleno centro de Tokio, porque sabía que iba a estar concurrido.
El suceso, que conmocionó a Japón, ocurrió durante la jornada dominical del 8 de junio de 2008 en el barrio de Akihabara, cuya zona peatonal ha estado cerrada hasta el pasado fin de semana por seguridad.
Kato, que entonces tenía un empleo temporal en un taller, atropelló con un camión a tres personas en esa zona peatonal, causándoles la muerte, y posteriormente mató a cuchilladas a otras cuatro, según la policía.
Durante su juicio, la fiscalía consideró hoy que, ante la gravedad del crimen, «no hay lugar para la clemencia» mientras está previsto que la defensa presente sus alegaciones el próximo 9 de febrero.
El tribunal de distrito de Tokio tiene previsto emitir sentencia el 24 de marzo.
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